El proceso comienza con una evaluación exhaustiva por parte de un terapeuta especializado en EMDR. El paciente comparte sus experiencias traumáticas y los síntomas que experimenta. A continuación, el terapeuta guía al paciente a través de una serie de movimientos oculares, que pueden ser laterales o verticales. Estos movimientos estimulan ambos hemisferios cerebrales y facilitan la reorganización de los recuerdos. En Madrid, la terapia emdr en Madrid ha encontrado un terreno fértil. Los terapeutas capacitados ofrecen sesiones individuales y grupales para abordar una variedad de problemas, desde el trastorno de estrés postraumático hasta la ansiedad y la depresión. Los pacientes informan mejoras significativas en su bienestar emocional y una mayor resiliencia frente a los desafíos de la vida. En resumen, la terapia emdr es una luz en el túnel para aquellos que luchan con recuerdos dolorosos.